LOQ’LAJ CH’OCH’ ha sido la inspiración de nuestra experiencia desde el año 2000 (legalizada desde 2003) trabajando con las aldeas del sur de El Petén y norte de Alta Verapaz, cuya población es mayoritariamente Maya Q’eqchí. Partimos de la premisa universal de que toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure salud y servicios sociales necesario, caminando junto a las aldeas Q’eqchí y sus dirigentes locales en busca de mejores condiciones de vida.